Gases como el sulfuro de hidrógeno (H2S) y el amoníaco (NH3) son compuestos orgánicos volátiles (COV), relacionados no solo con la generación de mal olor en las granjas porcícolas sino también con la afectación de parámetros productivos, como el porcentaje de enfermedades respiratorias y el porcentaje de mortalidad.
Estos COV son subproductos de la descomposición de los residuos de la actividad porcícola que generan olores desagradables. El mal olor procede de una mala e incompleta actividad microbiana en condiciones anaerobias, que propicia el desprendimiento de los COV. Estos tienen un efecto directo sobre la población de cerdos que se manifiesta en parámetros productivos como mortalidad, descartes y ganancia de peso, lo que afecta la rentabilidad de la actividad porcícola. La mortalidad y los descartes son dos parámetros directamente relacionados con la manifestación de enfermedades, siendo estas generalmente de carácter viral o bacterial.
Estas enfermedades generan en los cerdos problemas de dermatitis, diarreas y cojeras que reducen la rentabilidad, dado que se requiere aumentar las medidas de manejo con el uso de antibióticos y otros productos para reducir la enfermedad. Al implementar la aplicación de microorganismos benéficos tipo SobioTMO en las granjas porcícolas, se estabiliza y regula la población microbiológica, se reduce la manifestación de bacterias y virus y por ende, se reducen las enfermedades derivadas de estas. En este ambiente los cerdos tendrán un grado de mayor confort, menos estrés y así la tasa de conversión del alimento y la ganancia de peso serán mayores.
La reducción en los COV, mejora de manera directa los parámetros productivos de la actividad porcícola; en primera instancia propicia que los cerdos coman con mayor facilidad, y por ende el consumo es más alto, logrando obtener el mejoramiento de los parámetros productivos como se muestra en la siguiente tabla y figura.
observaciones
Con la aplicación del producto SobioTMO en granjas porcícolas en el área de ceba se obtiene:
Mejor bienestar de los cerdos en las granjas.
Menores problemas respiratorios y de dermatitis en los cerdos.
Mayor ganancia de peso, reflejado en el aumento del margen productivo de la granja.
Disminución del mantenimiento de equipos mecánicos en la granja por deterioro.
Mejor bienestar de los empleados.
Mejor relación con los vecinos, dada la disminución de olores ofensivos.